
y no me dejaste otra opción que arrancarme la piel y aguantar el dolor, y no escuché al corazón si borre de mi memoria el recuerdo de tu voz. Me marche sin hacer ruido para no decirte adios.
y aunque no seas tú mi unica droga y aunque no me tomara esa última copa, no he podido dejar de pensar en tu boca ni he perdido las ganas de quitarte la ropa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario