túdedesayuno.

túdedesayuno.

viernes, 31 de julio de 2009

me siento extraña.


-Tienes seis sonrisas. ¿Lo sabías?
Una cuando te ríes porque algo te hace gracia de verdad y otra cuando sólo lo haces por cortesía. Una cuando te sientes incómoda y otra cuando te ríes de ti misma. Una cuando algo te sorprende y otra cuando piensas en...
- ¿En qué?
- En él.

jueves, 30 de julio de 2009

vivir.


Da igual si quieres ser mi amigo o si quieres ser algo más. Me da igual si me acaricias, me besas, me dedicas momentos en tu cabeza, me abrazas o si no haces nada de eso… Sólo quiero que estés aquí.

...

sentir.




- No eres exactamente lo que la gente dice de ti.

- Ah, ¿no? ¿Y qué dicen de mí?

- Ya lo sabes...

- No.

- Pues, que eres el único donante de corazón que sigue vivo.

fluir.


- Pasas junto a todos los puentes de París, los 23. Te enamoras de uno y vas allí cada día con el café y el diario para dejar hablar al río.
- ¿Y qué te dice?
- Eso es cosa tuya y del río...

Quiero sentarme a hablar con-tigo sintiéndo que tigo está con-migo.

Si no te vas cuando quieres irte...


...cuando te quieras ir ya te habrás ido.

Supongo que cuando pierdes algo importante, sientes esto.


Te quiero a morir, te quiero a rabiar. Hay cosas que ni siquiera se pueden imaginar.
Y no hay nada más que pueda tranquilizarme. Hay días que voy hacia el huracán. Lo creas o no he oído tu voz sobre las demás, y no hay nada más que pueda tranquilizarme igual.

impotencia.


Estoy escuchando la habitación roja.. Llevo cuatro días para ver una película (de Woody Allen!!O.o). No sé ver películas enteras, me tenía malacostumbrada... jeje... joder, cómo puedo echar esas cosas tanto de menos... Me tumbo en la cama y pienso en él. En la pose sexy que me ponía mientras me decía que hoy elegía yo película. Le obligaba a decirme una letra hasta que alguna película que empezara por ella me gustara, sino, me decía otra... Si es que me ha soportado lo que no me ha soportado nunca nadie... Se me hace todo muy raro.

Con lo que nos costó empezar... y lo rápido que se me ha ido todo de las manos... Quiero luchar por él, quiero demostrarle que me importa, pero no quiero rayarle si está bien. Si con Bea está genial, ¿quién soy yo para meterme en nada? Me lo trago todo como había decidido en un principio y con el tiempo se hará menos fuerte... Él está perfectamente. Tiene la independencia que siempre ha querido y yo no quiero verlo...no, mi corazón se sigue acelerando demasiado cuando se acerca. Y, el otro día, más que nunca. Pero, claro, ya no seré "especial"... el otro día me dijo que ya no me quería igual... más claro, agua.

Me había empeñado en que todo nos iba fatal... ahora lo pienso y no. Había tantas cosas que merecían la pena... Cosas que ya he perdido... Y lo más gracioso es que ahora soy yo la que confía cien por cien en él. La que no duda de nada... y he tenido que perder su confianza, que mandar todo a la mierda, que dejar de luchar para darme cuenta de ello... es triste.

Tengo tanta impotencia acumulada... quiero poder luchar, joder! que no se haya cansado de mí, que me perdone tanta tontería, que me quiera la mitad de lo que le quiero yo... Quiero volver a estar con él y sentir que lo demás da igual. Quiero hablar con él... con nadie más he sentido nunca que conectaba tanto... que me conoce tanto... pero cómo soy tan subnormal...

Con razón dicen que no sabes lo que tienes hasta que no pierdes. Doy fe. Y tengo la sensación de que ya no hay vuelta atrás. Sí, sigues estando para escucharme... pero eres demasiado especial como para sólo hablarte... es que eres demasiado para todo... Yo quiero que sigamos matando monstruos el uno por el otro... Y tienes razón con que una relación como la que teníamos no sería aconsejable ni la quieres ni nada... pero se pueden hablar tantas cosas...

Y seguro que ha quedado toda una parrafada... jeje... pero en el cuaderno ya no puedo escribir más, jeje... no puedo ni olerlo... no puedo dejar de llorar al verlo... así que si estás leyendo esto, bendita tu paciencia, carapán.
¿Sabes? son las cositas pequeñas las que más de menos echo...

Te quiero, gordo...

sábado, 25 de julio de 2009

tanto tanto de menos...


Hay cosas que tengo que decirte:

Te pido perdón por las cosas que no te di, no te haré sonreír. Sólo quería envejecer a tu lado para que pudiéramos reírnos viendo cómo se nos arrugaba el cuerpo, juntos hasta el final, en el lago de nuestro cuadro -ése era nuestro cielo, ¿sabes?-; se echan de menos muchas cosas: libros, siestas, besos, discusiones, Oh Dios! Las hemos tenido buenas...

Gracias por eso, gracias por cada detalle, gracias por ser alguien de quien siempre he estado orgulloso, por tu coraje, por tu dulzura, por lo guapo que has sido, porque siempre he querido acariciarte... Dios, eras mi vida...

Te pido perdón por las veces que te he fallado, en especial por ésta...

Las buenas personas acaban en el infierno porque no saben perdonarse a sí mismas.

Yo no puedo.

domingo, 19 de julio de 2009

:)


mi madre me dijo a mí, que cantara y no llorara.

claro...


...te dejan aquí sola y te cansas de ver el jardín.

viernes, 17 de julio de 2009

A veces te echo tanto de menos que no lo soporto.


Dicen que enamorarse es un autoreflejo, como tener miedo. Yo fui una niña sin miedo, no me asustaban los fantasmas, ni los monstruos, ni la oscuridad, podía mirar debajo de la cama segura de que no habían esqueletos, ni vampiros. Podía enfrentarme a las niñas de quinto segura de que no me quitarían la merienda. Así, hasta hoy; segura de que puedo coger una magnum y avanzar por un callejón vaciando el cargador, porque no es eso lo que me da miedo, lo que me aterra es decir que sí a algo que no podre cambiar mañana, pensar en un sofá para toda la vida y un crédito hipotecario, en una declaración conjunta o en un.. esta tarde tenemos que hablar, buscar colegios y canguros, y pensar en un hogar para vivir cuando ya no tengamos pulso para sostener la magnum. Y de pronto todo ese terror se empieza a disfrutar como un looping de una montaña rusa y eso es la felicidad.

lo mejor que nos puede pasar...


...es olvidarnos sin más.

miércoles, 8 de julio de 2009

lágrimas.


Tal vez no cambien sólo las amistades, sino también los amores...
No me creo que este sea el fin... tanto tiempo, tantas cosas, tantos sentimientos, tantos recuerdos... y, ¿ahora sólo quedan un puñado de borderías? es triste... pero sí, es culpa mía, así que no me merezco quejarme, ni odiarte. En todo caso odiarme...

Eh, por favor, pase lo que pase, que sea muy feliz.